Quizás el entender que todo sucede por alguna razón, es el más difícil de los entendimientos, pero entonces así lo único que estamos haciendo es usar la lógica frente al beneficio del corazón, del amor a la vida, de vivir cada momento por amargo o dulce que ahora pueda ser, entendiendo que aunque el ahora parezca incomprensible y doloroso o quizás muy razonable y dichoso, en el fondo, todo tiene su entendimiento.
Y así ha de ser.
¡Feliz primer día -no festivo- del año!